Como saber si tu casa esta encantada

Es de suponer, que todos los que estáis leyendo este artículo sois amigos del misterio, por tanto, no os voy a descubrir nada nuevo, pero para aquellos que no estén familiarizados con el tema, o simplemente a modo de curiosidad histórica, hace unos años, en aquellas primeras revistan que tocaban el mundo de los desconocido´, nos daban una lista de señales que tendríamos que tener en cuenta para determinar si nuestra casa está encantada.

La Leyenda de los fantasmas de Goya

Y hoy me apetecía hablar de esa lista.

Ruidos inexplicables: Los más comunes, pasos, golpes, sonidos como arañazos o arrastrar de muebles y chirriar de puestas que se abren o cierran lentamente.
Luces: Intermitentes, que se encienden o apagan solas, esto también puede suceder con la televisión, radio o cualquier otro aparato electrodoméstico, y bombillas que estallan.
Cosas que aparecen y desaparecen: Llaves, anillos, pendientes, billeteras, pequeños objetos que estamos seguros de haber dejado donde no están, y que luego aparecen en ese u otro lugar en el que también hemos mirado.
Puertas y ventanas que se abren solas: Puertas de armarios, de habitaciones y ventanas que se abren inexplicablemente pese a habernos cerciorado de que estaban bien cerradas.
Sombras inexplicables: Sensación de que has visto que algo pasaba cerca de ti con el rabillo del ojo.
Extraño comportamiento de tus mascotas: Perros, gatos y otros animales que se comportan de forma extraña, ladrando o maullando a la pared, o que se niegan a entrar en una habitación determinada.
Sensación de ser observados o tocados: Alguien te está mirando, te acaba de tocar, lo notas, y un escalofrío recorre todo tu cuerpo cuando esto sucede.
Gritos o susurros: Voces ahogadas, murmullos, sollozos para los que no encuentras procedencia lógica.
Puntos fríos o calientes: Variación notable de la temperatura en determinados sitios de la casa.
Olores inexplicables: Fragancias de perfume que nadie de tu entrono utiliza, olores desagradable como a podrido.
Objetos en movimiento o levitando: Platos, vasos, cubiertos que se desplazan solos en la mesa, muebles que se mueven sin que nadie los toque.
Evidencias físicas y apariciones: Que alguien invisible te golpee o te arañe, huellas o dibujos extraños en las paredes o muebles, nieblas, brumas y apariciones con forma humana que aparecen y desaparecen. (Estas no serían para tener en cuenta, sino más bien para salir corriendo)

Y hasta aquí la lista. En futuros artículos hablaremos de como podemos proceder en el caso de que, si el miedo nos lo permite, queramos investigar en el origen del encantamiento de nuestra casa y de como seguir viviendo en ella sin más compañía que la de aquellos que forman parte de nuestra vida.

Fran González